domingo, 2 de marzo de 2014

Miércoles de Ceniza: "Conviértete y cree en el Evangelio"

Celebramos el inicio de la Cuaresma, (40 días orientados hacia el arrepentimiento de nuestros pecados y nuestra conversión de vida).

Oficialmente, la Cuaresma comienza el Miércoles de Ceniza y termina justo antes de la "Misa de la Cena del Señor" en la tarde del Jueves Santo. La duración de cuarenta días proviene de varias referencias bíblicas y simboliza la prueba de Jesús al permanecer durante 40 días en el desierto, previos a su misión pública. También simbolizan los 40 días que duró el diluvio, además de los 40 años de la marcha del pueblo israelita por el desierto y los 400 años que duró la estancia de los judíos en Egipto.

Algunas ideas a tener en cuenta

El Cristianismo, pese a lo que podríamos creer, en base a una formación insuficiente o defectuosa, es una religión orientada hacia nuestra liberación y nuestra felicidad. Liberación de todo aquello que nos oprime y nos limita en un sentido profundo.

Dios nos libera (por medio de nuestra comunión con Cristo y de los unos con los otros) para que podamos realizar nuestra vocación más profunda.

Es cierto que el Cristianismo habla de pecado. Esta palabra además de designar aquellas cosas que ofenden a Dios y que enturbian la relación con nuestro prójimo, tiene también el sentido de "errar el blanco", de no alcanzar la meta.

Cada uno de nosotros tiene sus "pecados" característicos, es decir: aquellas actitudes o formas de reaccionar que no sólo ofenden a Dios y enturbian nuestra relación con el prójimo, sino que también nos impiden desarrollar al máximo nuestras capacidades y talentos.

La tradición cristiana ha establecido una lista de "pecados básicos" con la que nos podemos examinar y "medir". Es seguro que no fallamos en todo, pero también es seguro que fallamos especialmente en algunos de ellos.


NOMBRE DEL PECADO ¿EN QUÉ CONSISTE? ¿CÓMO PODEMOS COMBATIRLO?
SOBERBIA Nos creemos mejores que los demás y llegamos a despreciar a otras personas por su sexo, raza, condición social, etc. Teniendo una correcta autoestima: sabiendo reconocer nuestros puntos fuertes y débiles
ENVIDIA Nos creemos inferiores a los demás y deseamos lo que ellos tienen. Nos alegramos con sus fracasos o problemas. Valorando lo que tenemos y procurando imitar las cualidades que vemos en los demás.
AVARICIA Somos incapaces de compartir lo que tenemos con los demás (el dinero, el tiempo libre, nuestras capacidades). Siendo generosos con nuestro dinero y tiempo. Procurando ayudar a los demás.
IRA Tenemos actitudes violentas de intención, palabra y obra. Somos agresivos, vengativos y rencorosos. Desarrollando paciencia y mansedumbre. Perdonando las ofensas y pensando bien de los demás.
LUJURIA Vivimos para el sexo. Nos sentimos frustrados si no lo conseguimos aquí y ahora, con quien y como queramos. Controlando nuestra imaginación y nuestras conversaciones. Ajustando nuestra actividad sexual a lo que necesitamos.
GULA Vivimos para la comida, la bebida y el consumo de sustancias dopantes, con efectos nocivos para nuestra salud. Controlando el consumo de todas estas sustancias, incluyendo medicamentos, café, tabaco y dulces.
PEREZA Carecemos de horario. Nos acostamos, levantamos, etc. cuando nos apetece. No tenemos un programa de desarrollo personal. Ajustándonos a horarios definidos que nos permitan rendir más en nuestro trabajo. Organizando nuestras vidas. Teniendo hábitos de limpieza.


Seguro que en una escala 0-10 (0 no me afecta en absoluto; 10 me siento totalmente aludido) todos superamos en algunos pecados la barrera del 5.

Sería interesante que, en esta Cuaresma, hiciéramos el propósito de alcanzar algún cambio positivo (que debería tender a ser permanente) en nuestros defectos más significativos.

Y esto, como cristianos, sabemos que será imposible sin la Gracia de Dios.

Amén


Elaborado por José Luis Mira